¿Estás preparando un viaje? ¿Quieres un lugar que reúna historia, cultura, arte y tradición? Pues prepara todo lo que necesitas porque hoy desde estas líneas te vamos a proponer un destino inmejorable con el que podrás aglutinar todo lo que estás buscando.

Hoy viajamos a Calasparra, en la Región de Murcia. Este municipio de algo más de diez mil habitantes pertenece a la Comarca Noroeste. Geográficamente y para situarlo, limita por su vertiente oeste con Moratalla, al este con Cieza, al sur con Cehegín y Mula, y por el norte con la provincia de Albacete.

Viajar al murciano municipio de Calasparra significará volver con una amplia riqueza cultural, y es que este lugar fue hogar de culturas tan significativas para nuestra historia como la íbera, la romana, la árabe y la cristiana. Todas ellas han dejado un legado único dentro de la propia historia del municipio, y prueba de ella es su riqueza arqueológica y artística que hoy podemos disfrutar.

Además del ámbito cultural, Calasparra se enclava en un espacio natural con unos paisajes que deben ser vistos por todos al menos una vez en la vida. Su emplazamiento y su situación geográfica entre los cauces de los ríos Segura, Argos y Quípar, le dan una seña de identidad propia y personal.

Sin embargo, si pensabas que aquí se acababa todo lo que este municipio de la Región de Murcia tiene por ofrecerte estás muy equivocado. En Calasparra la agricultura tiene una gran presencia, no obstante destaca el cultivo del arroz de Calasparra, con Denominación de Origen desde el año 1982.

Santuario Virgen de la Esperanza

Hablar del Santuario Virgen de la Esperanza es hacerlo de la única reserva natural terrestre con la que cuenta la Región de Murcia, Sotos y Bosque de Ribera o Cañaverosa. Si algo caracteriza a este lugar sagrado, declarado Lugar de Interés Geológico, es su ubicación en un entorno tranquilo y en plena naturaleza.

Lo monumental e impresionante de este Santuario del siglo XVII es su ubicación. Se encuentra en una gruta excavada en la roca y situada a 6 kilómetros del municipio. El Santuario alberca a dos imágenes de la Virgen de la Esperanza, que son conocidas en el argot popular como La Pequeñica y La Grande.

La Virgen de la Esperanza pequeña, fue encontrada por un pastor que guardaba su ganado en la cueva, y tras intentos fallidos de trasladarla al municipio por su peso, la Virgen finalmente se quedó allí para ser venerada. Sobre la segunda imagen, la grande, poco o nada se conoce, los únicos datos que se recogen son que en el año 1786 ambas imágenes ya eran veneradas juntas.

Castillo de San Juan de Calasparra

Esta fortificación, declarada en 1985 como Bien de Interés Cultural, se ubica sobre una montaña, en la Serreta de San José, un lugar natural mágico con los cauces de los ríos Segura, Quípar, Argos y Alhárabe.

El castillo está vinculado a la Orden San Juan de Jerusalén y fue el símbolo del poder de la orden sobre la población y las tierras, y es que controlaba los cauces de los ríos y poseía zonas de explotación agrícola.

Su origen se remonta al siglo XII, aunque a lo largo de los siglos ha sido remodelado en multitud de ocasiones. Hoy en día se encuentra en fase de restauración, y es que hacia el siglo XVII fue abandonado.

La Cueva del Puerto

Esta cueva se ubica en el noroeste de la Región murciana, en la ladera del Monte de Chatres. Aunque no se conoce su origen ni se han hallados restos que demuestren que fue habitada durante la prehistoria, como si ocurre con las Cuevas del Mármol y del Pito en la Sierra del Molino, la Cueva es uno de los elementos claves del municipio.

Cuenta con una extensión de 4.386 metros, con un desnivel de 114 metros de profundidad, de los que se pueden visitar unos 700 metros con un desnivel de 50 metros de profundidad. En la Cueva podemos observar elementos naturales como estalactitas, estalagmitas, columnas, cortinas o falsos suelos entro otros.

El Museo del Arroz

Como venimos hablando, Calasparra es cuna agrícola y del arroz. Este museo dedicado a este producto fue inaugurado en junio del año 2007 con una distribución en dos plantas. A lo largo de su recorrido podremos dar buena cuenta de la superficie arrocera de la comarca, de la formación y el proceso de cultivo del arroz, fotografías que muestran el trabajo de los agricultores, las variedades de arroz que se cultivan o las máquinas del siglo XIX empleados para tal fin.

Es tal el culto al arroz, al oficio y a la calidad del grano, que destaca en Calasparra el Monumento al Arrocero, ubicado en la confluencia de la Avenida Juan Ramón Jiménez y la calle del Teniente Flomesta.

Museo Arqueológico de Calasparra

El Museo ofrece un recorrido a lo largo de la historia del municipio y de las diferentes culturas a las que dio cuna. Podemos observar restos que van desde el Paleolítico hasta la Edad Media, con un total de 700 objetos.

Meta: Calasparra, la cuna de las civilizaciones íberas, romanas, árabes y cristiana, que cuenta con un imponente patrimonio cultural y también natural. Forma parte de su seña, el cultivo al arroz, que obtuvo el sello de Denominación de Origen en 1982. Espacios como el Castillo de San Juan, el Santuario de la Virgen de la Esperanza, el Museo Arqueológico o la Cueva del Puerto son de especial interés.