Las ‘VIII Jornadas 2022 Una Educación para el Siglo XXI’ siguen con su agenda en Calasparra

Las VIII Jornadas 2022. Una Educación para el Siglo XXI. Miradas desde las Ciencias y las Artes siguen con el desarrollo de las actividades que este año hay previstas en Calasparra.

Esta semana el alumnado de cuarto de primaria de todos los centros escolares ha podido conocer desde una nueva perspectiva el ciclo de vida del gusano de la seda y la elaboración de tejidos a partir de esta. Desde un enfoque didáctico y muy divertido, especialmente adaptado para estos jóvenes, han podido conocer los aspectos biológicos y las curiosidades más peculiares sobre este gusano y el preciado hilo que produce. También se les ha acercado a la historia de la seda en el mundo y especialmente de nuestra Región.

El alumnado ha podido disfrutar viendo de primera mano todos los estadios del ciclo de vida del gusano de la seda y experimentar con la maquinaria tradicional, con la que en nuestra Región se trataba la elaboración de este hilo.

Un año más desde AFEReM-Jornadas de Educación continúan trabajando para seguir presentes en el entramado social y llevar propuestas concretas que permitan ampliar información desde una visión crítica a la vez que aclaratoria. Los temas de Salud, Educación, Medio ambiente, Inclusión educativa e Integración del diferente, Mujer, Memoria…. son parte de las temáticas que siguen abordando durante estas jornadas.

El próximo jueves 28 de abril tendrá lugar en la Casa de la Juventud de Calasparra otra actividad que los jóvenes y la ciudadanía del municipio en general no se pueden perder, ya que Cayetano Gutiérrez Pérez, Catedrático de Física y Química, impartirá una divertida conferencia sobre titulada ¿Qué puedo hacer como ciudadano para frenar el cambio climático? Una oportunidad de conocer de primera mano los aspectos fundamentales sobre el cambio climático y que nos mostrará que es lo que podemos hacer para conseguir pararlo entre todos.

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La iniciativa, que se desarrollará durante tres anualidades, asciende a 500.000 euros y su objetivo es promover y preservar los paisajes y hábitats a través del mantenimiento del cultivo del arroz y sus rotaciones