La lluvia restó ayer protagonismo durante la mañana a quienes realmente eran las estrellas del día: los novillos-toros de Miura. Este sábado, día de la patrona de Calasparra, la virgen de la Esperanza, la expectación era máxima ante la presencia de estos astados de leyenda. Los Miura corrían por las calles del municipio y no hubo tormenta que frenara el gran interés del público que, a pesar de la lluvia y el aplazamiento del encierro, no dudó en presenciar este singular hito. Miles de personas estuvieron durante todo el día atentos a los medios de comunicación y los comunicados que iban avanzando las últimas decisiones sobre el encierro. Al final, con casi 9 horas de retraso respecto al horario previsto, el encierro salió a la calle y ya no se habló de la lluvia.

Los novillos de Miura corren por las calles de Calasparra bajo la lluvia

El encierro de ayer, el último de la Feria Taurina del Arroz de Calasparra, se tuvo que aplazar en varias ocasiones por la lluvia y el estado de la calzada, y no se llevó a cabo hasta que todas las medidas de seguridad, tanto para los corredores como para los miles de personas que llenaban el recorrido, fueron las adecuadas. El encierro se celebró finalmente por la tarde, con el público cobijado bajo los paraguas, arriesgadas carreras y más de una estrepitosa caída de los astados que llegaron a la plaza en un tiempo de 2´43 minutos. El encierro no registró ningún herido.

El Delegado del Gobierno, Diego Conesa, visita la Feria y Fiestas de Calasparra

El Delegado del Gobierno, Diego Conesa, el alcalde de Moratalla, Jesús Amo, el alcalde de Alguazas, Blas Ángel Ruipérez Peñalver y  los diputados regionales Alfonso Martínez Baños y Jesús Navarro, entre otros,  estuvieron este sábado paseando y apoyando la Feria y Fiestas de Calasparra. Diego Conesa presenció el encierro taurino, asistió a la misa en el Santuario en honor a la Virgen de la Esperanza en su día grande y acudió por la tarde al festejo taurino con los novillos de Miura.